Diciembre es el mes en el que llega Santa Claus, la mayoría de los niños y niñas ya escribieron su carta y llevan todo el año portándose bien para que les traigan muchos juguetes. Si han tenido la oportunidad de leer alguna carta a Santa o acordarse de lo que ustedes pedían pueden ver claramente la diferencia que hay en lo que piden las niñas y los niños. Las niñas por lo general piden muñecas y hay de muchos tipos; puede ser desde una Barbie, hasta alguna muñeca que llore sola, que le puedas dar de comer, que le tengan que cambiar el pañal (ya casi como un bebe de verdad). También piden el juego de té, para poder compartir con las amigas, cocinetas en donde vienen instrucciones para hacer cupcakes o algún pastel, casa de muñecas, la casa de la barbie, el coche de la barbie, o cualquier cosa que tenga que ver con barbies y por su puesto todo en rosa. Los niños pedirán generalmente cochesitos, balones de futbol, patines, patinetas, juegos de pistolas de juguete (o de lo que se use hoy en día), figuras de super héroes, o cualquier cosa que obviamente NO sea rosa y que los mantenga activos y preferentemente lo puedan usar fuera de la casa como en un jardín o parque.
Independientemente de lo que pidan las niñas y los niños a Santa o a Los Reyes Magos las opciones que tienen en materia de juguetes está limitada a lo que es para niños y lo que es para niñas, así como los colores que socialmente nos distinguen con rosa y azul.
Los juguetes que son “para niñas” generalmente tienen que ver con aprender a cuidar a los demás, prepararse para ser una buena esposa y prácticamente cualquier actividad que sea en el interior, en lo privado. Con este tipo de juegos a las niñas las vamos preparando para ser buenas madres, esposas, amas de casa y en general para que puedan hacer todo lo que como mujer se espera de ella por la sociedad, sólo falta ver como reacciona una niña a la hora que le dan una muñeca, la va a cargar, la va a arrullar y la va a abrazar como si fuera real porque así le han enseñado a hacerlo. Poco a poco las niñas van creciendo con la idea de que su rol, su papel es el de ser esposa y madre algún día, inclusive los cuentos siempre terminan con un final feliz donde el príncipe azul y la princesa “vivieron felices para siempre” y luego cuando a veces me preguntan que ¿por que para las mujeres es tan importante estar casadas? o que¿por que las mujeres vemos el matrimonio diferente que los hombres?, o ¿por que siempre sueñan con casarse y con tener su boda de ensueño? Y bueno la respuesta está en que desde niñas es lo que nos han estado repite y repite, los juguetes que nos regalan, los juegos que hemos inventado, las caricaturas e historias “mágicas” de princesas que nos toca ver. Cuando nos regalan una muñeca nos están enseñando a cuidar a los demás, a ser buenas madres; cuando nos regalan una cocineta para hacer pasteles nos enseñan a que debemos de cocinar y ser amas de casa, el juego de té es para poder ser buena anfitriona y servir a los demás, y bueno todo o casi todo en color rosa, porque el rosa es el color de las niñas.
En cambio los juguetes “para niños” generalmente son para que hagan sus actividades al exterior, o sea en lo público. Los carritos, las patinetas, los juegos de pelota, las pistolas de juguete, etc, etc. La mayoría los juegan en el jardín de la casa, en el parque o en la calle del fraccionamiento, lo niños aprenden a jugar afuera y para nada se les enseña a que deben cuidar a los demás, o a que deban ser buenos esposos, simplemente se les va forjando como hombres. Las películas que tienen princesas les parece una cursilería pues son “para niñas”, prefieren historias donde hay super héroes y bueno si pueden ver una que otra caricatura con princesas pero ahí ellos ven que los príncipes son los salvadores de las princesas. Por supuesto que su color es el azul en cualquier tono, o cualquier color mientras no sea rosa.
Si bien hoy en día los juegos han cambiado y las niñas y los niños a veces juegan de todo, el punto es que empezando por algo tan sencillo como lo son los juguetes vamos haciéndonos la idea de lo que socialmente se espera de una mujer o de un hombre. Así vamos adoptando los roles de género que muchas veces nos encasillan y que no permiten que la sociedad vaya avanzando hasta llegar a un punto medio en el que hombres y mujeres compartamos los mismos derechos y oportunidades. Y con esto no estoy diciendo que hay que dejar de comprar juguetes, los juguetes ahí están y no van a dejar de existir, pero no estaría mal que tanto las niñas como los niños experimenten con todo tipo de juegos y juguetes disponibles para que no se sientan encasillados o encasilladas un rol de género rígido si no mas bien abrirles el brindar un abanico de posibilidades para su vida.